martes, 19 de febrero de 2013

BURILES,FUNDAMENTACION TEORICA Y AFILADO






INSTITUTO TECNICO INDUSTRIAL

FRANCISCO JOSE DE CALDAS

ESPECIALIDAD MECANICA INDUSTRIAL J.T.




LIC. JOSE ARNULFO VILLANUEVA M.

ASIGNATURA: HERRAMIENTAS DE CORTE. GRADO 9°
TEMA: BURILES




2013





TEMÁTICA:



Fundamentación teórica

Que es una herramienta de corte o un buril

Que operaciones puedo realizar con el torno

Como se designa a un buril

 que hago con esta información

Conclusiones

Bibliografía y Cibergrafia













FUNDAMENTACION TEORICA
Las herramientas de corte utilizadas en máquinas herramientas,  como en el torno paralelo mecánico, debemos conocer las teorías  específicas de los buriles o cuchillas de corte.
 El torno paralelo mecánico es una máquina herramienta, que  nos permite la mecanización de piezas  metálicas o no metálicas de forma geométrica por revolución. El principio básico de operación y funcionamiento es cuando  en el cabezal (copa) se posiciona la pieza a maquinar y después en la torreta portaherramientas colocamos la  herramienta de corte.
El   eje  de la copa o cabezal recibe movimiento   circular  de la cadena cinemática (motor, caja Norton) haciendo  girar la  pieza y luego  se acerca el portaherramienta para  hacer tangencia superficial entre la pieza y el buril  con el fin de  mecanizar (rebajar el metal ) y conseguir las formas  geométricas revolucionadas según plano y orden operacional.
Con el carro portaherramienta girado  nos permite hacer inclinaciones  hacia la derecha o hacia la izquierda (0 ° a 90°) y así poder obtener conos (operación de conicidad).
 el torno  paralelo mecánico tiene cinco componentes principales saber:
1)      Bancada: Sirve de soporte para las otras unidades del torno. En su parte superior llegan guías por las que se desplaza el cabeza móvil o contrapunto y el carro principal.
2)      Cabezal fijo: Contiene los engranajes (caja Norton)  o poleas que impulsan la pieza de trabajo y las unidades de avance. Incluye el motor, husillo, selector de velocidad, selector de unidad de avance y selector de sentido de avance, sirve para soporte y rotación de la pieza de trabajo que se apoya en el husillo.
3)      Contrapunto: el contrapunto es el elemento que se utiliza para servir de apoyo y poder colocar las piezas que son torneadas entre puntos, así como otros elementos como porta brocas, o brocas para hacer taladrados, este puede mover y fijarse en diversas posiciones en lo largo de la bancada.
4)      Carro delantal: consta de carro principal, que produce los movimientos de la herramienta en dirección axial, y del carro transversal que se desliza transversalmente sobre el carro principal en dirección radial.
5)      Cabezal giratorio o copa: su función consiste en sujeta la pieza, a mecanizar. Hay vario tipos de copas de mordazas independientes de cuatro mordazas o  la copa universal, mayoritariamente empleada en el taller mecánico,  y copas magnéticas y de seis mordazas.

¿QUÉ ES UNA HERRAMIENTA DE CORTE O UN BURIL?
 Son las herramientas  o cuchillas de acero rápido (HSS) o insertos de tungsteno (wolframio) que cortan, desbastan el material en forma de viruta metálica desprendida del material en bruto.
El concepto de  buril: es  una herramienta manual de corte o cuchilla formada por una barra prismática con geometría volumétrica (paralelepípedo base cuadrada, base rectangular o cilindro) de acero templado, y afilada en el esmeril  en uno de sus extremos o punta  en forma de filo que sirve fundamentalmente para, cortar, marcar, ranurar o desbastar material.

 OPERACIONES A REALIZAR CON EL TORNO PARALELO MECANICO


En el torno tendremos nuestro pedazo de material, como una barra, y dependiendo de este, podemos hacer las siguientes acciones.
Cilindrado, refrentado, ranurado, roscado, Moleteado (conos, torneado esférico, segado o tronzado, chaflanado, taladrado.
Cada una de estas o la gran mayoría contara con su propio buril, así como subtipos en cada buril, así como también tendremos calibres en cada uno de ellos.


COMO SE DESIGNA A UN BURIL.
Un buril se designa básicamente por los tipos, cada tipo tendrá su aplicación, subtipos.
Aquí veremos la aplicación en una sencilla imagen.

Fig.3: Buriles en pieza
 
Según la imagen tenemos los siguientes tipos.
Los de tipo A
Que son buriles que servirán para cilindrar y barrenar.
Dentro del tenemos dos tipos, Estilo AR, que es mano derecha y AL, que es mano izquierda.


Tipo B
Buriles para desbastar.
Estilo BR, mano derecha 15º Angulo.
Estilo BL, mano izquierda 15º Angulo.

Tipo C
Buriles para herramientas de forma
Estilo C, nariz cuadrada.

Tipo D
Buriles para acabado y perfilado.
Estilo D, nariz en punto, 80º Angulo incluido.

Tipo E
Buriles para roscar.
Estilo D, herramienta de roscado, 60º Angulo incluido.
Estilo ER, hacia derecha
Estilo EL, hacia la izquierda.

Tipo F
Buril para refrenar y esquinar.
Estilo FR y FL, para derecha e izquierda respectivamente.

Tipo G
Buriles para cilindrar y esquinar.
Estilo GR y GL, para derecha e izquierda respectivamente.

Tipo CTR
Cuchilla de corte.
Estilo CTR

Aquí vemos entonces la forma que tendrá el buril, la aplicación que tiene según el texto anterior y también el acabado que tendrá en nuestra pieza maquinada, simulando donde ira el buril, que acabado tendrá.

 QUE HACER CON ESTA INFORMACIÓN
En el taller de mecánica industrial iniciar el afilado didáctico de los buriles según guía de aprendizaje  limando en balso cuadrado de 15 mm y posteriormente empleando varilla cold-roll  cuadrada de 3/8” calibrada cada una de las geometrías de los diferentes tipos o clases de afilado de cuchillas y buriles.
Para finalizar afilando técnicamente buriles HSS y de insertos de tungsteno  en el esmeril que luego empleara el estudiante de grado noveno de la especialidad de mecánica industrial en las operaciones de mecanizado en  el torno y en prácticas del taller según ruta de trabajo, orden operacional y planos 





mecánicos.




CONCLUSIONES:

Con la información sobre BURILES el estudiante de grado 9° de la especialidad de mecánica industrial adquiere la competencia y los conocimientos básicos para poder afilar técnicamente los buriles para ser utilizados en el torneado de piezas metálica
La precisión, motricidad y esmerilado en  el afilado de buriles garantiza trabajos de calidad superficial fina en  cada una de las piezas mecánicanizadas  el torno paralelo, así como prolongar la vida útil del buril, disminuir costos económicos, energéticos y  en tiempos de mecanizado para conseguir un buen trabajo al momento de tornear.
Al esmeril buriles H.S.S. emplee la piedra o rueda del esmeril adecuada (gris grano grueso, fino o superfino) y para buriles de insertos de tungsteno (wolframio) emplee la piedra de color verde.
Siempre bajo  la asesoría y supervisión del docente titular y normas de seguridad industrial y salud ocupacional afile los buriles y las herramientas de corte (gafas, monogafas, overol, tapa oídos, refrigerante (taladrina).






BIBLIOGRAFÍA Y CIBERGRAFIA:

Guías de aprendizaje técnico ITI-FJC. ESPECIALIDAD MECANICA INDUSTRIAL.
Maquinas. Cálculos de Taller. A.L. Casillas.
Alrededor de las maquinas. GERLING.
Manual de Mecánica Industrial. 4 TOMOS. Editorial Cultural S.A.
Trabajo con el torno. Serie Taller Mecánico. Manuales Delmar. Centro Regional de ayuda técnica. AID.
SENA. Unidades CBS. Colección Básica Sena. Centro Metalmecánico, Bogotá Colombia.
El torno y la fresadora. Nadreau.
Alrededor del torno. Walter Bartsch, Carlos Saenz de Magarola
Tecnología de los metales. Apple y otros. Editorial Reverte
Manual universal de la técnica mecánica. Oberg, Jones, Horton. Editorial Labor.








19 comentarios:

  1. EL BURIL

    Es un amigo el buril,
    tan leal y tan cercano,
    prolongación de la mano
    como otrora fue el candil.
    Se adapta a nuestro perfil,
    a nuestra norma y trabajo
    tan presto para un atajo
    como engaste minucioso,
    y malvive estando ocioso
    y se muestra cabizbajo.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  2. DE LOS BURILES EL MANGO

    De los buriles el mango
    fue deformando mis dedos,
    y alimentando mis credos
    en ir subiendo de rango.
    Entre las gemas no hay fango,
    pero el mango da durezas
    y aristas con asperezas
    y callos sobre las palmas,
    que van templando las almas
    en busca de las certezas.

    Saturnino Caraballo Diaz
    El Poeta Corucho

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  3. SIEMPRE NOS QUEDA LA ESPERANZA
    A los jóvenes engastadores

    Nuestra vida es de entrega a la astillera
    y su fin se prolonga entre estertores
    de taladros finando moridores
    que agonizan sobre esta paramera.

    Sin piedras germinando en la pastera,
    se enmohece el buril en sinsabores,
    y este ocio impuesto a los engastadores
    no es un mástil que pliega su bandera.

    Pues no oyendo el tac- tac de los cinceles
    que cincelan auríferos metales,
    el Santo Eloy en gualdrapas de corceles

    del séquito de Dios y angelicales
    gemas nos bajará sin aranceles
    y engastaremos joyas celestiales.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  4. EN ALCORCÓN A TANTOS DE TANTOS

    Recorro tus campos, ando en tus calles,
    perseveró en mi afán,
    conocí a mi esposa, engendré a mis hijos
    y amasé aquí mi pan.

    Campos vi de trigo y vi de cebada
    tras de mi ventanal,
    de esmeralda olas vaivén de las brisas
    de aire primaveral.

    Y fue aquí en Santa María la Blanca
    mi boda y desposar,
    de mis hijos ante el ara el bautizo
    antes de echar a andar.

    Trabajé en casa y tuve en mi taller
    el cincel y el buril,
    la gema, la lupa y base del fuste
    y un soneto en mi atril.

    Vine a un pueblo, y ahora es ciudad,
    Alcorcón sideral,
    con sus amplias y extensas avenidas
    y un moderno hospital.

    Aquí envejezco, en Alcorcón prosigo,
    y bien puedo dar fe
    de un cambio existencial evolutivo
    que palpable se ve.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  5. SINFONÍA DE LAS GEMAS DE COLOR
    A una dama de la joyería Grassy

    LA ESMERALDA

    Al engastarla es temida
    sobre todo en calibrado,
    si lasca en el cincelado
    nos complica bien la vida.
    Mas si queda bien ceñida
    y perfilado el bisel,
    un jardín será y vergel
    de dama lozana y bella
    convertida en una estrella
    y sus dedos en joyel.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  6. EL ZAFIRO

    Antiguamente se dijo:
    que dabas inteligencia
    y eras prodigio de ciencia
    y de un Dios terrenal hijo.
    Y como no se desdijo,
    yo te engasto por mi parte,
    y entre el oro aprisionarte,
    afirmado sobre el fuste,
    mientras procedo a tu ajuste,
    inspirado por el arte.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  7. EL RUBÍ

    Es alegre y es divino
    con su color rojo intenso,
    y figura entre el incienso
    de la iglesia, el pan y el vino.
    Y me lo asignó el destino
    que en un cáliz lo engastara,
    y al Vaticano viajara
    mostrándose a Jesús-Dios
    y mi alma inmortal en pos
    con él a Roma volara.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  8. EL FUSTE

    Del permanente contacto
    hermanado con la mano
    eres probo ciudadano
    afectuoso y, suave al tacto.
    Tú maderamen compacto
    amarrando a tantas joyas
    a la luz de claraboyas
    de antiguos engastadores
    tráenos días mejores
    y condumio a nuestras ollas.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  9. LA LAMPARILLA

    Eres de vidrio y panzuda
    y echas fuego por la boca,
    y tu flamear evoca
    llamarada cachazuda.
    Sobre la mesa estás muda
    y esperas paciente al fuste,
    y tu pabilo no asuste
    a la goma apelmazada,
    que fundida es nominada
    prisión de joya y su ajuste.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  10. LA LUPA

    A veces colgada al cuello
    o adosada sobre el ojo;
    como tengo dos te escojo
    dependiendo del destello.
    Y te agradezco por ello
    que en tus aumentos se agrupa
    unos engastes de aúpa,
    engastando noche y día
    entre aquella algarabía
    de gemólogo con lupa.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  11. BRILLANTES NIMBADOS EN LA BANDEJA
    A Teresa siempre

    Fulgiendo sus destellos luminosos
    destellan multiformes en bandeja,
    con la pinza en la mano que empareja
    los brillantes de nimbos glamurosos.

    Cascadas de hontanares prodigiosos
    de expositor de un Niágara es pareja,
    y el nimbo inmaculado nunca ceja
    de exhibir sus aspectos más gloriosos.

    Las gemas que tu presencia iluminan
    mantienen a mis ojos expectantes,
    gemas que entre mis buriles germinan

    las garras las oscilan rutilantes,
    y mis manos artesanas culminan
    sobre el nimbo que nimba a tus brillantes.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  12. LA GRANETERA

    Es esposa del granete
    y del Tas es compañera,
    y adorno de la pastera
    cuando emite el sonsonete.
    Y se cubre con bonete
    donde abrillanta la hondura,
    que al grano le da apostura
    sobre el pavés de la banda,
    que la belleza demanda
    del engaste la finura.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  13. LA SILLA ERGONÓMICA

    Sin duda fue un gran invento
    con su respaldo abatible,
    y pude hacer dirigible
    mi comodidad de asiento.
    Y me siento en mi elemento
    puesto que soy menudito,
    yo sentado en mi escañito
    y ya sin dolor de espalda
    al brillante o la esmeralda
    a su engaste los invito.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  14. LA ASTILLERA

    Es como un bastión y ábside del fuste
    decorando la faz de esta mi mesa,
    valladar defensor es de mi empresa
    de mi engaste y proceso de mi ajuste.

    Del caos abomina sin que asuste
    deslumbrante diadema de princesa,
    y en el orden acoge sin sorpresa
    cualquier joya impensada aunque no guste.

    Sobre ella se proyecta mi mirada
    y el recuerdo de luz de la redoma
    y tú, ancestral y atávica madera.

    En versos del poeta eres cantada
    antes de que la incuria y la carcoma
    te acaben voraz, mi amada astillera.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  15. ¿NOS QUEDAREMOS SIN ORO?

    Émula no pareces piel de toro,
    de Sudáfrica o Rusia con sus minas
    que dragan y hasta emplean dragaminas
    en la extracción de sus gemas y su oro.

    En tanto, tú te ves bañada en lloro,
    viendo peregrinar a tus vecinas
    que solapadas, prestas o cansinas,
    confluyen todas en un mismo foro.

    Con pulseras, cadenas o sortijas,
    tras puertas de un chillón gualda amarillo,
    su tesoro se pesa y se desliza

    en crisoles que aprietan las clavijas
    y en lingotes de acaudalado brillo
    cual tu dinero se evapora en Suiza.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  16. LA PULIDORA DE JOYERÍA

    De la bella joyería
    con la joya terminada,
    vemos luego de acabada
    su belleza y maestría.

    En la astillera el joyero
    tiene ocasión de lucirse,
    por joya que al exhibirse
    le pone en fila el primero.

    Después va el engastador
    poniendo guinda a la tarta,
    y entre los dos se halla Marta
    con su motor pulidor.

    Usa cepillo y borrego
    y pasta de abrillantado,
    y por fondos el calado
    con caña se emplea luego.

    Jira girando la rueda,
    su polvo negro soltando,
    y Marta se va impregnando
    con lo que flotando queda.

    Romos tiene ya los dedos,
    huérfanos viven sin uñas,
    semejando fuertes cuñas
    capaz de mover roquedos.

    Exponente de un oficio
    en estado terminal,
    del trabajo artesanal
    que es ya ruinoso edificio.

    Llegó imparable el progreso
    y la maquinaria impuesto,
    y quedados con lo puesto
    artesanos del proceso.

    Marta se va a jubilar
    puesto que ya nada espera,
    y se quedan en la acera
    los que han de evolucionar.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  17. EL ENGASTADOR, EL BRILLANTE DE TRES
    QUILATES, EL GALLO Y LAS VECINAS

    Suceso es real y cierto,
    en Madrid y en pleno centro,
    también el engaste incierto
    y un gallo se cuela dentro.

    Retirándose a comer
    un colega al mediodía,
    desguarneció en su taller
    brillante de gran cuantía.

    Quedó solo en la bandeja
    sobre la pulcra pastera,
    sin emitir una queja
    y en silencio la astillera.

    Por una ventana abierta
    desde el patio de vecinos,
    inició una descubierta
    un gallo de los más finos.

    Con un corto y torpe vuelo
    se encaramó en el dintel,
    aterrizando en el suelo
    que le sirvió de escabel.

    La ronda ya comenzada
    entre oteo y cabildeo,
    el fulgor de llamarada
    le deslumbró en su paseo.

    Y aquel gallo pretencioso,
    viendo en él su vivo espejo,
    cacareó majestuoso
    retratado en su reflejo.

    Y con recio picotazo
    el brillante se tragó,
    y fue lazada y fue lazo
    que la vida le costó.

    Al gallo vio la sirvienta
    de un prócer del principal,
    que fregoteaba lenta
    entre arrobo virginal.

    Llegado el desventurado
    espeso tras la comida,
    con un grito desgarrado
    exclamó:"¡hostias mi piedra huida"!

    Y encorvado por el suelo,
    escudriñándolo a gatas,
    blasfemaba contra el cielo
    entre tallas de oro y platas.

    Acudieron las vecinas,
    el prócer y su sirvienta,
    se despoblaron cocinas
    y bizcaba una asistenta.

    Bulla, bullanga y dislate
    y cónclave en la escalera,
    y exponiendo escaparate
    una moza ventanera.

    Salió el gallo a la palestra,
    quien oculto en un rincón,
    con una llave maestra
    el prócer dio defunción.

    Un cuchillo por ensalmo
    apareció en una mano,
    y sin letanía y salmo
    le abrió en canal un profano.

    Y el brillante apareció
    verdad que un poco manchado,
    pero fúlgido lució
    en solitario engastado.

    Pues el Madrid de posguerra,
    el de las hambres caninas,
    y tiestos colmos de tierra
    criaba gallos y gallinas.

    Y tal vez como anticipo
    de tiempos que se avecinan,
    colegas os participo
    si a lo mismo nos conminan.

    Saturnino Caraballo Díaz
    El Poeta Corucho

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  18. este es otro comentario sin un poema

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